En la luna llena más próxima al 1 de mayo, en la antigüedad se celebraba Beltane.
Como ya dijimos en la entrada de la Rueda del Año en el antiguo calendario celta no habían cuatro estaciones como tenemos a día de hoy, si no que solo habían dos: la época oscura, que se celebraba el 1 de noviembre (Samhain) y la época de luz, que se celebra el 1 de mayo (Beltane).
Como no podía ser de otra manera, en Beltane también se rendía culto a un Dios, en este caso se trata de Belenos, el cual era muy parecido al Dios Apolo de la cultura clásica griega. El significado de su nombre es “Dios brillante”. Estaba relacionado con el sol, la vitalidad y la juventud, aunque también era Dios de la medicina, la salud y la curación. Como homenaje a Beltenos, Beltane era una festividad completamente repleta de fuego, por ello, se encendían hogueras en las montañas y colinas, y se hacían grandes banquetes y danzas alrededor del fuego en su honor. Otra práctica muy común, era la de saltar por encima del fuego, como forma de purificación.
Para los celtas, Beltane daba la bienvenida a la época estival, al calor, a los días largos y noches cortas, y por lo tanto, al verano.
A parte de la tradición de encender hogueras que ya hemos comentado, en Beltane era típico celebrar matrimonios y tener relaciones sexuales (se creía que quien nacía fruto del sexo en esta noche, tendría suerte el resto de su vida). Era la festividad celta más enfocada al amor y a la fertilidad de todas las del calendario celta.
Hablando de las bodas celtas, estas duraban un año y un día: si durante ese tiempo la pareja seguía enamorada y tenían buena convivencia, en la siguiente Beltane se hacía oficial el matrimonio. Si durante ese tiempo dejaban de estar enamorados o no había buena relación, podían disolver el matrimonio sin ningún tipo de compromiso.
Beltane se asocia mucho a la fertilidad sexual y a las cosechas, pues en esta época la naturaleza está en su apogeo y atrás quedaron los días de frío. Esto significa un cambio de ritmo de vida, ya que se podrá dedicar más tiempo a las actividades diurnas: la caza, las conquistas, las guerras, la agricultura y la ganadería. Es totalmente lo opuesto a la festividad de Samhain, que marca el fin del ciclo y la entrada a la época oscura.
Como Beltane era una festividad de fertilidad, había una práctica muy típica en los pueblos celtas, que consistía en colocar un gran palo, el cual tenía largas cuerdas a su alrededor, y se danzaba alrededor de el, rodeándolo con las cuerdas. Esto ha llegado a nuestros días y es conocido como “palo de mayo”. El palo simbolizaba el “falo” del hombre y las cuerdas simbolizaban la unión con la mujer.
También ha llegado a neustros días la llamada “dama de mayo” que consistía en elegir a la joven más bella de la aldea, y se la adornaba con flores y un precioso vestido blanco. Esto representaba a la primavera, a la madre naturaleza y a la fertilidad.
Los jóvenes celtas iban a las casas de las jóvenes celtas a las que pretendían, y les cantaban y dejaban todo tipo de ofrendas, como alimentos o flores.
Con el tiempo, Beltane fue conocido como la noche de Walpurgis. Santa Walpurgis, muerta en el año 778 dC, era venerada por los cristianos como protectora contra la hechicería. Su fiesta es el 1° de mayo, coincidiendo con la fiesta pagana de Beltane. Esa noche ha sido identificada en el Fausto de Goethe como el “sabbat de las brujas”. Esto no fue ni más ni menos que otra manera de la iglesia de demonizar una fiesta pagana y terminar con sus raices y costumbres, prácticamente lo que ha hecho la iglesia a lo largo de la historia con todo vestigio de religiones ajenas al cristianismo.
Para terminar, os dejo este video de YouTube sobre Beltane y la noche de Walpurgis, titulado Walpurgisnacht, del maravilloso grupo de música Faun.