Finalmente, el gobierno sueco ha reculado en su intento por prohibir las runas y otros símbolos del paganismo nórdico. Tras revisar la ley actual sobre etnicidad, se ha determinado que esta es correcta y por lo tanto la legislación es totalmente adecuada.
Durante estos días, muchas organizaciones neopaganas han hecho presión al gobierno sueco mediante recogida de firmas, cartas y difusión en las redes sociales, una presión que ha surgido efecto, pues cada vez son más las personas seguidoras de la religión Ásatrú, además del número incalculable de gente amante y seguidora de las creencias y cultura de esta sociedad ancestral.
Desde aquí queremos dar las gracias a la Comunidad Odinista de España por haber estado al pié del cañón desde el primer día para evitar que se prohibieran las runas.
¡Feliz fin de semana!